«Si crees que eres más espiritual porque manejas una bicicleta al trabajo, pero juzgas a los que usan automóvil, caíste en la trampa del ego.
Si crees que eres más espiritual porque has dejado de ver televisión porque pudre el cerebro, pero juzgas a los que aún la ven, caíste en la trampa del ego.
Si crees que eres más espiritual porque escuchas música de meditación y sonidos de la naturaleza, pero juzgas a los que aún escuchan música de los medios masivos de comunicación, caíste en la trampa del ego.
Si crees que eres más espiritual porque eres vegano, haces yoga, usas cuarzos, practicas Sanación Energética y lees libros de conciencia, pero juzgas a los que no son como tú, caíste en la trampa del ego.
Al ego le gusta meterse en nuestras vidas desapercibido. Y aunque siempre comienza con una intención noble, se distorsiona para alimentar su dinámica individualista. El ego propaga la separación y es así como nos tienen divididos y controlados.
Cuidémonos de la trampa del ego».
__
Paráfrasis de autor anónimo.
Gracias hermano, un abrazo fraterno.