¿Cuál es el propósito de la muerte? Podemos empezar hablando que seres humanos tenemos un gran conflicto en nuestra mente. ¿Y cuál es este conflicto? El identificarnos con la forma. Quiere decir que creemos nada más un cuerpo. Recordemos leyes como «la energía no se crea ni se destruye, sólo se transforma» o que «toda la vida siempre va creando vida».
Este mundo energético y espiritual de hecho está viviendo esta experiencia física. Tú no eres cuerpo, eres alma. Y a través de estos niveles de ti –alma, Ser- vas grabando información vida tras vida. Nunca te desapareces, nunca te desintegras, siempre vas adquiriendo más y más información. Y es muy bonito que exista el tener un «cierto límite».
Tiene varios propósitos muy positivos eso que llamamos «muerte». Que por cierto, a Lau y a mí nos encanta decirle «transición» siempre que hablamos de alguien que murió; mejor decimos «trascendió», recordándole a nuestra mente que esa persona está pasando a otro nivel de conciencia.
Entonces lo que pasa es que la muerte nos da la posibilidad de disfrutar la vida al máximo, porque al sabernos finitos, al saber que todo tiene un periodo en esta Tierra, en esta matrix 3D –y también tus hijos, y también tu familia y también tus padres-, puedes disfrutar más, prestar más atención al momento presente, al aquí y ahora.
Por eso cuando alguien trasciende, seguro has dicho «¡Gracias! Yo tengo hijos, tengo familia, tengo papás… ¡Gracias! Lo voy a valorar más». Cada vez que alguien trasciende, de hecho nos conecta con ese disfrute del momento presente, de que somos bien afortunados, de que todavía estamos vivos y está viva nuestra familia.
Y cuando alguien de la familia trasciende, alguien cercano, recuerda que está soltando el cuerpo, pero sigue siendo alma, sigue siendo conciencia. Y te voy a decir esto: La muerte es el mejor viaje que vas a hacer en tu vida.
Por eso es que tantas personas con experiencias cercanas a la muerte o personas que están a punto de trascender, ven es a sus familiares –papá, mamá, tía, etcétera- que ya han trascendido, y siempre los ven sanos y felices; también ven seres de luz, seres de energía. Y eso les da demasiada tranquilidad en esos momentos de transición, porque recuerdas que la energía y el alma son eternas, y sólo el cuerpo es finito. Y esto es algo muy positivo porque nos ayuda a mantener atención en el momento presente, disfrutar, agradecer, vivir cada experiencia como si fuera la única porque no sabes después qué va a suceder. Eso tiene de sorprendente la transición.
Y otra cosa es que la muerte nos ayuda a liberarnos de nuestras limitaciones. Cuando alguien no le está entendiendo a la vida y a través de pensamientos sostenidos negativos se está enfermando, se genera pruebas menos fáciles… Llega un momento en que ese cuerpo ya está con mucha presión energética.
Es muy bonito que la muerte sea ese proceso de soltar tu propia creación; borrón y cuenta nueva; aprendizajes cumplidos; entendimiento de las leyes de la energía…
O sea que por donde lo veamos, la transición, la muerte, es ese proceso de seguirte transformando, seguir aumentando tu vibración, seguir integrando más información a tu alma, a tu conciencia. Eso es algo muy amoroso, por eso es que es parte de la vida en este planeta y en muchos planetas este proceso de transición.
Recuerda que a la mente lo que le duele es no poder controlar las situaciones. Si al ego algo le gusta, es el control; sea pasivo o activo. Cuando alguien trasciende, nuestro ego dice «Pero yo no di permiso de que esa persona trascendiera, yo no lo apruebo, yo no lo dije que sí se podía ir». Entonces lo que duele demasiado en una transición es el querer controlar las cosas por parte de la mente. Por es es que a muchas personas les duele más cuando trasciende una persona joven, un niño, un adolescente, que cuando trasciende alguien de 70 u 80 años, por las expectativas o el control que tú quieres hacia con esa persona joven; dices «todavía le faltaba estudiar, trabajar, casarse, vivir ciertas situaciones…». Y esto es según tú, según tu control, según tu ego. Pero tienes que saber que la vida es perfecta, la conciencia es perfecta, la vida sabe cómo cuidarse a sí misma, no necesita que tú ego, tu mente diga qué hacer… Y eso es lo que duele, que no te pidió permiso la vida.
A nivel de alma tú sabes que las cosas suceden en el momento perfecto. «Cuando el alma está lista, las cosas que la rodean también lo están». Todos sabemos el momento en que vamos a llegar llegar a la matrix 3D y cuando nos vamos a salir. Es por eso que muchas personas que están a punto de hacer una transición (aunque crean no saberlo) y es –por ejemplo- por un accidente, hacen las pases con su familia, piden perdón, e incluso arreglan sus documentos, su testamento… O empiezan a soñar con personas que ya trascendieron. Quiere decir que todo estaba sincronizado para esa transición, sea un joven, un niño o un adulto, siempre hay una sincronía perfecta.
Y claro, todas las personas que trascienden nos dejan una enseñanza muy grande. ¿Se vale sufrir y llorar? ¡Claro! Pero también se vale entender los propósitos de esta transición, de esta liberación, de esta evolución. Y también se vale recordar los momentos de mucha gratitud, todos los momentos felices con esa persona, todo lo que te enseñó, todo lo que disfrutaste… y agradecerlo. En lugar de sólo pensar en todo lo que extrañas, porque eso sigue siendo una ilusión, es del futuro, del ego..
Es un tema en nuestra vida y cultura que sí es importante trabajar un poquito más. Hay mucho amor más allá del que podemos ver con la mente, con el ego. El alma entiende toda esta transición y toda esta evolución y se alegra por esta transformación; tanto tu alma como la de los que trascendieron.
Todos estamos unidos a niveles de alma. Entonces aprendamos de estas experiencias, disfrutemos el momento presente y si estás vivo o viva, di «gracias, estoy viviendo aquí». Y después vas a vivir experiencias en muchos niveles. Nunca dejas de existir, siempre estás transformándote de forma.
Celebremos la vida, sonriamos, agradezcamos todas las grandes enseñanzas, todo el amor que has vivido con las personas que parece que ya no están, solamente no tienen cuerpo físico, pero su energía, su conciencia, sigue siendo. Y cada vez brillan más y más.
Muchas gracias por leerme. Un gran abrazo.
Gracias por tan hermoso mensaje, para saber como llevar este dolor y cariño por un familiar que hemos perdido y ver la vida de otro punto de vista y vivir la mejor cada día y no automartirizarnos y enfermarnos por algo que esta bien y todos vamos a pasar por eso. Gracias muchas gracias…..